Licencia de conducir canadiense conseguida

Buf!, que poco me gusta el estrés de los exámenes...

Como os comenté hoy me he tenido que ir a Orillia, un pueblo al norte de Ontario para examinarme del carné de coche.
Por mucho que te mentalizes de que sabes conducir después de tantos años, cuando se sube el examinador al coche, vuelves a vivir la misma sensación que la primera vez.

Total, que me presenté allí media hora antes del exámen, que es lo que te exigen, y me tocó una "abuela" de 70 años que le costó hacer el trayecto andando de la oficina al coche, ¡os lo juro!.

Así que, con un semblante más que serio, me preguntó por mi experiencia conduciendo anteriormente y varias cosillas más, hasta que me dijo que si no tenía ninguna pregunta, que podía comenzar.

Me ha tenido 40 minutos dando vueltas por el pueblo, intersecciones,semáforos, "all way stops", escolares... una maravilla,¡¡vamos!!, después me ha llevado a lo más parecido que tienen a una autopista por allí durante unos escasos 2 kilómetros, y junto con un aparcamiento y una parada de emergencia en el arcén, me ha llevado de vuelta a la oficina para decirme de manera muy seca: "Has aprobado".

Osea que no ha sido un paseo fabuloso, pero ya tengo el carné que es lo que importa.
Ahora a hacer el exámen médico para la escuela de camioneros, y a mover uno de esos monstruos de 40 toneladas que le dan color a las carreteras americanas.

Una vez más, gracias a todos por los mails, comentarios, y el apoyo en éstos días de estrés, que se agradece un montón, de verdad.

¡Un besote enorme!