viernes, 21 de diciembre de 2007

Niágara en invierno


Aprovechando que hoy no teníamos nada que hacer (¡milagro!), que había salido el sol, y que no había previsión de nieve, nos hemos ido a dar una vueltecilla por Niágara, a ver como está aquello en invierno.

Obviamente, lo esperado, con cien por cien de humedad, y bajo cero, no había por allí casi nadie, y la sensación era como pasear por un congelador sin "no frost", de esos antiguos, con trozos de hielo pegados por todas partes.

La verdad es que el espectáculo merece la pena, y poder visitar la cataratas sin apenas turistas, eso no tiene precio.



¡Ésto es un copo de nieve de Bilbao!

Por lo demás, mañana me presento al práctico del carné de conducir, en una oficina 200 kms. al norte, pero bueno, es el único sitio donde me daban fecha antes de Navidad, así que ya os contaré.
Por cierto, viendo las fotos, me he acordado de uno de mis photobloggers favorito, (y el de mucha otra gente), que postea una foto diária de una calidad increíble y que curiosamente vive en Toronto. Sus fotos de las cataratas congeladas en 2004 no tienen desperdicio. Si podéis pasar un poco de tiempo viendo su archivo de fotos, me lo agradeceréis.

Ahí va un ejemplo de su trabajo y el enlace de su página web:



http://wvs.topleftpixel.com/archives/photos_landscape/040217_470.shtml


1 comentario:

Pitus dijo...

Efectivamente!,puedo dar fe de que a eso es a lo que llamamos un copo de nieve en Bilbao!
Suerte en el práctico y espero que hayas recibido la foto que te mandé por e-mail.
Un abrazo desde el Basque Country!
(Lago)